Las policías locales son las encargadas de velar por la seguridad vial en las poblaciones, mientras que otros cuerpos de seguridad, como la guardia civil, hacen lo propio en la red de carreteras. Para ello, no dudan en incorporar avances tecnológicos de última generación para hacer más efectivo su trabajo.
Según hemos tenido constancia, varios ayuntamientos de las Islas Baleares han provisto a sus policías locales de Discover e-Lite. Se trata de una solución informática conectada a una cámara, que lee al instante la matrícula de los vehículos infractores y lo coteja en tiempo real con la base de datos de la D.G.T. Este es un claro ejemplo de la incorporación de las nuevas tecnologías a las tareas cotidianas de la policía de tráfico.
La importancia de estos sistemas informáticos es fundamental. La matrícula es el signo identificativo de un vehículo. Su nombre oficial. Esta matrícula está asociada al titular del vehículo y toda una información completa relacionada con el automóvil, que va desde su historial de infracciones, las revisiones de la I.T.V. o el pago del seguro. La información se encuentra archivada en la base de datos de la D.G.T. (Dirección General de Tráfico).
Hasta hace poco, los policías de tráfico lo que solían hacer era tomar nota del número de la matrícula y después llamar por teléfono a la comisaría para que un agente consultara los datos de la D.G.T. Hoy, gracias a la informática, las comprobaciones son inmediatas, por lo que con ello se pueden evitar muchas irregularidades.
Como hemos dicho antes, este es solo un ejemplo. Estas son algunas de las innovaciones tecnológicas que la policía está empleando en materia de seguridad vial:
Los radares móviles.
El uso de radares, principalmente en autopistas, no es un tema nuevo. De hecho, hace unos años se llegaron a comercializar dispositivos, que los conductores podían incorporar a sus coches, y que advertían de la presencia de radares, para que el usuario aminorara la velocidad. En la actualidad, los son más difíciles de detectar.
La función de los radares es la de detectar el exceso de velocidad. Gracias a ellos se pueden evitar accidentes tanto en carreteras y autopistas, como en vías urbanas.
La web de coches Idóneo explica que un radar funciona por medio de la emisión de ondas electromagnéticas. Estas son lanzadas por un emisor, rebotan en un vehículo en movimiento y las recoge un receptor. Una aplicación calcula la velocidad exacta del vehículo y en el momento de que exceda el límite de velocidad, dispara una cámara automática.
Los radares más conocidos son los radares fijos. Estos se solían colocar en un poste alto o una cabina, en cualquiera de los dos lados de la carretera o en una estructura tipo pórtico, como los anuncios digitales que emplea la D.G.T. en las autopistas.
Estos radares se han complementado con los radares móviles, De hecho, son los más utilizados en la actualidad. Dentro de estos radares se encuentran los radares trípode, que suelen estar al lado de la carretera, a unos metros del suelo, y que son manejados a distancia por un agente, y los radares de vehículo, incorporados en un coche patrulla de la guardia civil o de las policías locales.
Cámaras de video.
Las cámaras de tráfico son un componente esencial en los sistemas de videovigilancia automatizados utilizados en seguridad vial en España y en muchos otros países.
Suelen colocarse estratégicamente en autopistas, intersecciones críticas y zonas de construcción. En las autopistas permite ver en tiempo real lo que está sucediendo en la vía. En las zonas urbanas suelen colocarse cerca de escuelas, hospitales y áreas con una alta concentración de peatones.
Las intersecciones críticas son puntos rojos donde existe peligro de accidente, como puede ser un cruce de vías o una zona con poca visibilidad. En las zonas de construcción se colocan para garantizar la seguridad de los conductores mientras se están efectuando obras de mejora o perfeccionamiento de las carreteras.
Las cámaras utilizadas pueden ser cámaras fijas o cámaras PTZ (Pan-Tilt-Zoom). Las fijas tienen una inclinación determinada y carecen de Zoom, mientras las PTZ pueden moverse en vertical y horizontal, cubren un campo de visión más amplio y emplean el acercamiento de imagen.
Las cámaras capturan las imágenes en tiempo real y la transmiten a una sala de control por medio de una red de comunicaciones. En el centro de control se procesan las imágenes y en el momento en el que se aprecia una infracción, se pasa la información a los agentes de tráfico para que efectúen la acción oportuna.
Uso de drones.
El periódico El Confidencial Digital señala que la Guardia Civil cuenta en la actualidad con 325 drones, de ellos, 39 se utilizan habitualmente en labores de vigilancia relacionadas con la seguridad vial. Este es un dato significativo, ya que en el 2021, este cuerpo policial solo disponía de 89 drones.
El uso de drones en seguridad vial ha adquirido una importancia creciente en la gestión del tráfico. Estas aeronaves no tripuladas ofrecen una perspectiva aérea única que complementa los métodos tradicionales de monitoreo de carreteras. Entre las ventajas más destacadas de utilizar drones en seguridad vial se encuentran:
- Vigilancia en tiempo real: Los drones proporcionan una visión en tiempo real de las condiciones del tráfico, permitiendo una respuesta más rápida ante incidentes y emergencias.
- Cobertura amplia: Cubren grandes áreas de forma eficiente, lo que resulta especialmente útil en autopistas, carreteras secundarias y zonas remotas donde la vigilancia tradicional es limitada.
- Inspección de infraestructura: Los drones permiten inspeccionar carreteras, puentes y otras infraestructuras de manera detallada, identificando daños, necesidades de mantenimiento y riesgos para la seguridad vial.
- Detección de infracciones: Pueden identificar infracciones de tráfico, como exceso de velocidad, conducción temeraria o uso de teléfonos móviles al volante, proporcionando evidencia visual para hacer cumplir las normas de tráfico.
- Búsqueda y rescate: En situaciones de accidentes graves, los drones pueden ayudar en la búsqueda y rescate de personas atrapadas o en peligro, en áreas de difícil acceso.
- Reducción de costes: Comparados con la movilización de personal y vehículos, los drones son una opción más económica para la vigilancia y la obtención de datos en tiempo real.
- Flexibilidad y adaptabilidad: Los drones pueden ser desplegados de manera rápida y flexible en función de las necesidades específicas de seguridad vial, lo que los convierte en herramientas versátiles.
- Recopilación de datos: Pueden recopilar datos importantes para la planificación del tráfico y la toma de decisiones, como el flujo de vehículos, las condiciones climáticas y el estado de las carreteras.
Vehículos equipados.
Los vehículos policiales equipados desempeñan un papel crucial en la garantía de la seguridad vial. Estos vehículos disponen de una serie de dispositivos y tecnologías avanzadas que permiten a las fuerzas del orden llevar a cabo sus tareas de vigilancia y aplicación de las leyes de tráfico de manera eficiente.
Uno de los dispositivos más comunes en los vehículos policiales es el radar de velocidad. Estos radares permiten a los agentes controlar el exceso de velocidad de los conductores y detectar a aquellos que superan los límites establecidos. La velocidad excesiva es una de las principales causas de accidentes de tráfico, por lo que estos radares desempeñan un papel clave en la prevención de accidentes y la promoción de una conducción segura.
Además de los radares, los vehículos disponen de cámaras de video. Estas cámaras pueden capturar imágenes de las carreteras y las intersecciones, lo que proporciona evidencia valiosa en caso de accidentes e infracciones. Las grabaciones de video pueden ayudar a determinar la responsabilidad en un accidente, se pueden utilizarse para verificar el cumplimiento de las normas de tráfico, como el respeto de los semáforos y las señales de parada.
Los alcoholímetros, que miden el contenido de alcohol en el aliento de un conductor, son otro dispositivo común en los vehículos policiales. El alcohol al volante es una de las principales causas de accidentes mortales en carreteras. Los alcoholímetros son claves para detectar conductores ebrios y aplicar las sanciones correspondientes. La presencia de estos dispositivos actúa como un elemento disuasorio y fomenta una conducción más responsable.
Los alcoholímetros están complementados con sistemas más precisos de detección de consumo de drogas, como las pruebas de saliva, por las que en cuestión de minutos pueden detectar si un conductor conduce los vehículos bajo los efectos de una sustancia estupefaciente, de qué droga se trata y qué proporción tiene en el cuerpo.
Además, los vehículos policiales cuentan con sistemas de comunicación avanzados. Estos sistemas permiten a los agentes estar en contacto constante con sus compañeros en el centro de control, lo que facilita la coordinación en situaciones de emergencia y la respuesta rápida a incidentes de la carretera. Estos sistemas transmiten información en tiempo real sobre incidentes, como accidentes o atascos, lo que permite una gestión más eficiente del tráfico.
La seguridad vial es un tema sensible. En ella puede estar en riesgo la vida de las personas. La tecnología, en este campo, nos ayuda a que las carreteras y calles sean más seguras.